El Papa agradece a Dios por beatificación de valiente Obispo torturado por el comunismo

VATICANO, 25 Jun. 17 / 11:01 am (ACI).-

El Papa Francisco, tras el rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, dio las gracias por la Beatificación, en la localidad lituana de Vilnius, del Obispo de Kaisiadorys Mons. Teofilo Matulionis, quien sufrió la persecución, la cárcel y la tortura del régimen comunista ruso.

“Hoy en Vilnius, Lituania, se ha proclamado Beato al Obispo Teofilo Matulionis, fallecido como consecuencia del odio a la fe en 1962 cuando tenía casi 90 años. Damos gracias a Dios por el testimonio de este valiente defensor de la fe y de la dignidad del hombre”, señaló el Santo Padre.

 

La ceremonia de beatificación estuvo presidida por el Cardenal Ángelo Amato, Prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos.

El Beato Teofilo Matulionis nació en 1873 en la Gobernación de Kovono, actual departamento lituano de Kaunas. Finalizó sus estudios en el seminario de San Petersburgo. En 1900 fue ordenado sacerdote católico de rito latino. Entre 1912 y 1914 fue vicario de la iglesia católica de Santa Caterina de San Petersburgo. En 1922 fue nombrado párroco de la iglesia del Sacro Cuore de Petrogrado.

Sin embargo, sufrió la persecución del régimen comunista instaurado tras la revolución rusa y en 1923 fue arrestado con un grupo de sacerdotes encabezados por Mons. Jan Cieplak. Entre el 21 y el 26 de marzo de 1923 se desarrolla en Moscú, y a puerta cerrada, el juicio contra él, y el Tribunal Militar lo condenó a 3 años de cárcel.

Cumplió su pena en las prisiones de Sokol’miki y de Lefortovo, y en enero de 1926 fue puesto en libertad. El 9 de febrero de 1926 fue consagrado en secreto obispo en la iglesia de San Luis de los franceses en Moscú. El 8 de noviembre de 1929 fue nuevamente arrestado en Leningrado.

El 13 de septiembre de 1930 fue condenado a 10 años de trabajos forzados en un campo de concentración, y fue internado en Solovki. En septiembre de 1933 fue trasladado a Moscú, liberado y deportado a Lituania. En 1946, tras la retirada de Lituania de las fuerzas de ocupación alemanas, fue nuevamente arrestado y condenado a otros 10 años de trabajos forzados en Siberia, condena que cumplió hasta 1956 en que recuperó la libertad.

Regresó a Lituania sin poder administrar su diócesis. Poco antes de morir, recibió del Papa el título de Arzobispo. Falleció en la localidad lituana de Seduva el 20 de agosto de 1962.

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