Por: Ivette de la Harpe | Fuente: Tiempos de Fe, Año 2, No. 10 La «fe del carbonero», que es aquella del que cree a ciegas, no sirve para una persona educada. Debemos educar nuestra fe tal como educamos el resto de nuestros conocimientos. Debemos conocer la voz del Buen Pastor, guiados por Él y…