Manos Unidas Valencia en colaboración con varias parroquias de la Archidiócesis está desarrollando un proyecto en el sur de Kenia para facilitar el acceso al agua y al saneamiento a tres escuelas rurales.
De esta manera se evita el abandono escolar de las niñas y se contribuye a mejorar las condiciones sanitarias y de formación de la población rural.
Los tres colegios están situados en el condado de Narok, en el sur de Kenia, una zona árida, muy pobre y donde la escasez de agua es uno de los principales problemas.
Por eso subrayan que el acceso de la mujer a la educación es “la principal herramienta para revertir esa situación”.
El proyecto consta de la instalación de un sistema de recogida y almacenamiento del agua de lluvia y de la instalación de letrinas separadas por sexos, ya que de no estar diferenciadas, “las chicas al llegar a la pubertad dejan de asistir a clase y acaban por abandonar definitivamente los estudios”.
También impartirán formación sobre el uso responsable del agua y de prácticas de higiene para que repercutan en el “aprendizaje y en la salud de los niños”.
Además está prevista la creación de huertos para aprovechar la canalización del agua y la enseñanza de técnicas de agricultura familiar para que se puedan cultivar vegetales para la alimentación